sábado, 4 de marzo de 2023

Los Titus de marzo

Aunque no lo parezca hay socialistas -Patxi, antes Pachi, López ha dicho que conoce unos cuantos, pero qué más da- muy mirados con las tradiciones cristianas, incluso si son de origen pagano y aunque (en última instancia, ya que siempre hay algún fondo tonto por ahí) haya que pagar a escote, o por escote. 

Como esa cuadrilla, partida o cofradía gastroérótica asociada a un tal Tito -nada que ver con el de Verano azul-, que se iba de picos pardos (y polvos varios) con “muchachas” -muyayas, en canario- a costa de dinero dudoso. Y claro, en un país donde la vianda se va volviendo prohibitiva, los están crucificando como si…, a ver, como si hubieran matado un perro, por ejemplo. 

Y eso que, siendo justos, han cumplido escrupulosamente con toda la preceptiva de rigor, que exige que la cosa carnal se consuma antes de la Cuaresma. Que es lo que han hecho. Nada que objetar, pues. Si acaso, el saltarse la norma, no escrita, por otra parte, de no desprecintar el salchichón -los que aún hagan matanza- antes de Jueveslardero. 

Y los presuntos -me refiero a los señalados, no al pernil curado al humo, que no consta si probaron ni en qué fechas-, lo que viene siendo el salchichón, lo tenían en modo epifanía hacía tiempo. Lo cual tampoco es que sea pecado; todo lo más, un poco de agonía. Y otra cosa en su descargo: lo han hecho antes del 8-M. 

Que es por lo que me parece excesivo, y hasta inadecuado, sacar el tema (que aquí vaya si lo hay) o el asunto, si quieres, en pleno carnaval, que ya se sabe que hay bula, de gula y si me apuras, de lujuria. Como si se hubieran jartao de secreto ibérico (un buen título para este thriller). Vamos, como si se hubieran saltado la cuaresma, cuando no es así. E igual, para cumplir aún más con lo ordenado, mantenían la vigilia los viernes. Porque lo que es pescado, había. 

Así es que no sé a qué viene tanta repulsión en la boca de los compañeros ministros de esa panda de vividores, como si los hubieran visto comerse un arroz con gato, que es ilegal (las putas, no). Y más, estando en su mano la solución y el castigo a tanta “maldad”. Pero igual puede más la hipocresía. Y la partitocracia. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario